Mónica, niñera después del colegio - 46018 Valencia

Nunca había pensado que cuidar niños y niñas podría llegar a ser una salida laboral - temporal, claro- hasta que entré en el mundo del voluntariado con nanas y nanos que sufrían sordera. Al poco tiempo, comencé a hacer voluntariado con Fevadis, que trabaja con personitas con diversidad funcional psíquica, y me encanta.
Estoy estudiando Integración Social, además de cualquier curso que salga y pueda ampliar mi formación y experiencia.
En el último que me he enrolado ha sido el de Asistente Personal para personas con discapacidad.

He realizado varios servicios de cangureo, con personas con y sin diversidad funcional, sin contar los campamentos, y ahora me gustaría encontrar algo más serio porque del voluntariado no se puede vivir.

He participado también como mentora en el Proyecto Pigmalión, que es un servicio que ofrece el instituto en el que estudio al alumnado de E.S.O que vienen de familias "desestructuradas", y lo que necesitan es un espacio que les proporcione voz, una escucha activa y les permita expresarse con libertad.

Tengo 21 años, estoy llena de energía y soy cariñosa. Mi hermano dice que soy un poco sargento, pero, ¿qué va a decir? Es el pequeño.
Me encanta jugar, realizar juegos que supongan un reto mental, y hacer excursiones que me hagan conectar con mi yo y la naturaleza.
Diré también, que los deberes no son mi momento favorito del día -de hecho, no soy nada partidaria de mandar deberes a casa-, pero si nos tenemos que sentar y hacerlos, ¡con los cinco sentidos puestos! Aunque, a veces, cuando no queremos sentarnos a hacer las tareas, resulta interesante trabajar con economía de fichas. ¿No te parece?

En periodos vacacionales mi disponibilidad es mayor.
¡Nos vemos!